1.-Limpia tus muebles todos los días
Aunque parezca algo obvio, no todo el mundo quita el polvo de sus
muebles a diario. No se requiere de grandes esfuerzos, basta con
pasar un paño seco sobre los muebles para quitar el polvo que acumulan
en cada jornada.
2.- Lustra tus muebles con cera en pasta
La mejor forma de proteger tus muebles es aplicando cera en pasta de
calidad al menos una vez por semana, luego de quitarle el polvo. Con el
paso de los años, los muebles conservarán su aspecto original.
3.-Protege los muebles de la luz y el aire
La superficie de los muebles puede deteriorarse fácilmente si les llega
la luz directa del sol o están expuestos a corrientes de aire
acondicionado. Resguarda tus muebles colocando cortinas en las ventanas y
alejándolos de la exposición directa del aire acondicionado.
4.-No apoyes recipientes calientes
Es necesario colocar paños o accesorios para apoyar ollas o elementos
calientes sobre los muebles, de lo contrario quedarán marcados. A menos
que lijes la superficie dañada y vuelvas a pintar el mueble, no habrá
forma de quitar las manchas.
5.- Limpia las manchas cuanto antes
Es muy importante pulir los muebles para que conserven su color y
brillo original, pero también lo es el cuidarlos de los derrames que
pudieran ocurrir sobre ellos. Si sucede, debes limpiarlos inmediatamente
con un paño seco, si dejas que se seque corres el riesgo de que la
superficie absorba la sustancia y quede manchada.